A través de la presoterapia, se realiza un drenaje linfático de lo más eficaz. La máquina utilizada para realizar esta técnica, está especialmente diseñada para desintoxicar el cuerpo a través de la presión que ejercen sobre el flujo linfático y venoso.
Con tan solo 30 minutos de tratamiento, un par de veces a la semana durante unos pocos meses, estarás viendo resultado notables y gozando de una gran mejora en tu sistema circulatorio y también si padeces de celulitis o piel de naranja.
Ventajas del drenaje linfático
El drenaje linfático que se lleva a cabo durante el tratamiento de la presoterapia, aporta numerosos beneficios dependiendo de la zona que estemos tratando. Por ejemplo:
- El sistema muscular. A través del masaje que se ejerce durante la presoterapia y la estimulación del drenaje linfático, estamos contribuyendo a tonificar nuestras articulaciones y músculos, además de reforzar los tejidos conectivos de nuestro cuerpo. También ayuda a aliviar el estrés y la tensión, a promover la sensación de bienestar y a estimular los puntos nerviosos motores.
- El sistema circulatorio. Con el drenaje linfático, estamos ayudando a mejorar nuestra circulación sanguínea y a hacer que el oxígeno del cuerpo sea cada vez mayor. Además, contribuye a eliminar desechos metabólicos y puede resultar muy beneficioso en la lucha para bajar la presión arterial.
- Tonificar la piel. Con el masaje que se realiza con la máquina de presoterapia, se aumenta el suministro de sangre a la piel, nutriendo así los tejidos y contribuyendo a la regeneración celular.
- Sistema linfático. Con la presoterapia y su masaje, estamos ayudando a elevar la circulación de la linfa, que es la encargada de eliminar los residuos metabólicos y de estimular el sistema inmunológico.
Posibles contraindicaciones
Aunque la presoterapia es un tratamiento muy inocuo y natural, es aconsejable que se abstengan aquellas personas que sufren de TVP (trombosis venosa profunda), enfermedad cardíaca o de infecciones en las piernas o en las zonas a tratar.
Si se tiene algún tipo de dolencia, es necesario que se consulte con el médico antes de empezar cualquier tipo de tratamiento estético, como la presoterapia, la mesoterapia o la cavitación.