Se calcula que casi un cuarto de la población española sufre de insuficiencia venosa crónica, es decir, las antiestéticas varices hacen aparición en muchísimas personas que las sufren en silencio. Aunque su mayor incidencia es a partir de los 40 años, también aparecen en personas jóvenes, sobre todo en mujeres, lo que puede llegar a causar un impacto estético en ellas.
Las altas temperaturas no hacen más que agravar el problema, agudizando los problemas vasculares y debilitando las paredes venosas, haciendo que surjan más varices. Lo que puede empezar como un problema estético, puede acabar resultando bastante molesto y doloroso.
Factores y síntomas
La mayoría de varices aparecen en las piernas y en forma de finas líneas azuladas, que pueden verse agrandadas por el calor y otros factores como:
- Los embarazos.
- La obesidad.
- La falta de ejercicio físico.
- La herencia genética.
- La edad.
- El uso de anticonceptivos hormonales.
- Permanecer largos periodos sentados o de pie.
Los síntomas que más caracterizan a la insuficiencia venosa crónica son los siguientes:
- La pesadez en las piernas.
- Calambres, cansancio, comezón, hormigueos e incluso fuertes dolores en las extremidades inferiores.
- Sensación de calor.
- Hinchazón de tobillos y pies.
Estos signos van acentuándose conforme pasa la jornada y cuando cae la tarde es cuando más los notamos, después de haber estado en activo, de pie o sentados un largo rato.
Presoterapia y varices
Ante la aparición de los primeros síntomas es muy recomendable acudir al médico vascular, que será el que determine el grado de nuestras varices y el encargado de emitir un diagnóstico concreto.
Una sugerencia muy activa y que se puede probar (siempre bajo supervisión médica), es un tratamiento de presoterapia. Esta técnica, efectuada a una presión muy suave (por debajo de los 50 milibares), es muy capaz de contribuir y ayudar al organismo a realizar un drenaje linfático muy eficaz en las piernas.
Una buena circulación en esta zona de nuestro cuerpo será la que nos ayude a poder prevenir la aparición de varices y a evitar la pesadez de piernas y la mala circulación linfática.
¿Sufres de varices? ¿Cómo las combates tú?